jueves, 27 de noviembre de 2014

Los maestros nos parecemos a las mariposas.

A simple vista parece extraña esta comparación,pero en el fondo le encuentro grandes e interesantes similitudes,principalmente por aquello de las permanentes metamorfosis, si..¡Espléndido tener la capacidad de renovarse transformarse,ser capaz de sortear fuertes vientos que llegan de todos los lados ! algunos de ellos controvertidos en una suave brisa , otros por el contrario amenazantes y arrasadores,más paradójico aún el poder resguardarnos como las mariposas debajo de débiles y sutiles hojas  , porque ... es bien cierto que los maestros estamos plenamente expuestos e inmersos en grandes tempestades. Sin-embargo Lo admirable , bello y significativo  es  el poder comprobar que  tras nuestro vuelo.¡ como ellas! vamos transformando, cambiando sembrando nuevas posibilidades.Debemos seguir pintando el mundo de magníficos colores, seguir polinizando las mentes del futuro, acariciar , admirar,deleitarnos en ellas, hasta intentar penetrar su corazón, contemplar su  permanente transformación  paralela a la nuestra , para al final no poder saborear la miel, ni recoger los frutos.Ojalá este nuevo vuelo hacia las aulas virtuales sea un campo sembrado de flores y no de espinas.

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